sábado, 24 de diciembre de 2011

Historia de Golondrinas

Érase en la campiña una niña amable y cordial, lustrados sus zapatos de charol siempre brillantes a la luz del sol estos reflejaban su sonrisa,  esa que la acompañaba todos los días por la tarde en la plaza mayor, sentada en la banca de siempre, sintiendo la brisa pasar, corriendo el viento de norte a sur, hasta esto parecía rutina…. todo era usual, la vida era tranquila, como si fuese un vinculo unificador de los pueblos de la serranía, era como su gente, representaba la apacibilidad, agradables, nostálgicos y a veces con la mirada triste que se pierde entre montañas y quebradas, añorando tiempos pasados y preguntándose por futuros inciertos…. Sin embargo, Estos pensamientos a la niña (protagonista de este relato) no abordaban, inmiscuida en ese su mundo de fantasía e ilusión en el cual no por voluntad, mas si por obligación  se veía condenada a ser  participe, se sentía fuera de ese aquí y ahora. Era la protagonista de una historia de no acabar, un mundo donde el telón siempre estuvo abajo, la realidad expresada en un fondo negro que se encargaba a punta de creatividad de darle vida, sentido y emoción.

Sin embargo sabia que fuera del mundo de sueños propio de sus aspiraciones había una realidad distinta, la gente no siempre reía, no siempre había una sonrisa en el corazón de todos, no siempre estaban juntos, sentada en la banca esperando que alguien se acercase a ella y le preguntara como te sientes? Aguardaba las tardes….regresaba a su hogar caído el sol, con la esperanza que al día siguiente la historia seria distinta…  fue un lunes cualquiera cuando sentada en la banca de siempre escucho un… Hola!!!!! Revolotear alrededor de su ser, su corazón se paralizo de la emoción, sintiendo su voz quebrarse, tímidamente respondió hola… luego de un par de risas la voz  le dijo… por estos lugares de vez en cuando vengo, traspaso la cordillera visitando amigos y familiares, me reciben alegres y risueños, si no lo están para eso estoy… para robarles una sonrisa y demostrarles que aunque a veces la vida se muestre incierta siempre habrá un motivo para sonreír….  Mi extrañeza nace al verte en la misma banca cada tarde… siempre sola, al parecer esperando…. O me equivoco??  La niña sonrojada por la observación atino a bajar la cabeza y quedarse en un silencio que la delataba….. Seguida de un par de risas la voz dijo.. Nos vemos mañana….alzo vuelo y se perdió entre los techos de calamina de las casonas cercanas... Al sentirse sola la niña se levanto de la banca, comenzó a correr, a buscar refugio en su casa… con el animo en el corazón y con la curiosidad de saber a quien pertenecía aquella voz que esa tarde la acompaño…. Al día siguiente y toda la semana, en la misma banca del parque por las tardes, la pequeña y su amiga golondrina cultivaban su amistad, por primera vez en mucho tiempo, la niña sentíase abstraída de su particular mundo, de sus historias de princesas y lobos, de reynos lejanos y amores imposibles, para abrir su mente a historias de golondrinas, de pueblitos escondidos en lo mas recóndito del ande, donde la gente cultivaba lo necesario y compartía lo que tenia, de picaflores y zarcillos que elaboraban sus nidos con cuidado y detalle, de zorros de arriba y otros de abajo que rondaban las granjas esperando saciar su desmedida hambre,…  la imaginación de la pequeña volaba con las historias de la golondrina, su corazón se sentía alegre a su lado, la satisfacción de tener a alguien a quien llamar amiga le escarapelaba el cuerpo y llevaba su existencia a un estado el cual sus 8 años no le permitían describir…


…y pasaron las semanas, la suave brisa de la tarde fue cambiando hasta convertirse en lluvia, esta que caía de costado y mojaba el charol que se opacaba como el día… esa era la señal… otro lunes cualquiera, la pequeña golondrina cuenta se dio que era momento de alzar vuelo y adentrarse en el ande tal cual su naturaleza se lo solicitaba… las lagrimas corrían por las mejillas de la pequeña mientras la golondrina posada en su hombro le susurraba en el oído… volveré… me extrañaras y yo también, te tendré en cuenta en mis viajes y siempre estarás conmigo, espero que no me olvides y me esperes en la banca de siempre, con la esperanza en el alma y con una sonrisa en el rostro, siempre supe que esperabas a alguien, lo que nunca imagine es q era a mi…. La niña seco sus lagrimas, acaricio con el dedo la cabeza de su emplumada amiga terminando en su puntiagudo pico y le respondió… te esperare…. La golondrina alzo vuelo ,con la firme voluntad de regresar, sabiendo que una parte de ella se quedaba en ese pueblo se perdió entre las nubes y los cerros, y la niña espera su regreso, con el entusiasmo de siempre y con el recuerdo intacto de su amiga... tan especial como el vinculo que desde ese hola!!!! Las unió. Su invidencia la abrazo nuevamente, solo que ahora todo era distinto… ya no solo estaban personajes de sus cuentos sino también la huella de un mundo del cual su amiga golondrina se encargo de enseñar, una realidad que desea descubrir en compañía de la viajera que esta por llegar.

Una promesa es una promesa… en fin.

Mizpa.


No hay comentarios:

Publicar un comentario